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El nuevo Blog es http://reflexionesenmileto.blogspot.com.es/.Saludos

Bertolt Brecht

«El peor analfabeto es el analfabeto político. No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. No sabe que el coste de la vida, el precio de las alubias, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas. El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales».

Bertolt Brecht

Aitor cuervo

Reivindico a Fidel Castro y al Ché
o para todos o para nadie el café,
reinvidico la contundencia Bolchevique
a los comandos de Baader y Ulrike,
reinvindico el muro antifascista de Berlín,
reivindico al vietcong, reivindico a Ho Chi Min,
reivindico a Stalin, reivindico a Beria,
reivindico a los burgueses en Siberia,
reinvindico a las milicias de partisanos
reivindico a los combatientes republicanos.
reivindico Sierra maestra, la guerra de guerrilas
a quién murió de pie antes que vivir de rodillas.
Reivindico a los últimos fusilados
a los Octubre Rojos del proletariado.
reivindico la lucha por el pan y por la tierra
pues para que haya paz es necesaria la guerra.

Aitor Cuervo

Lamentable suceso el acaecido ayer en la apertura de curso 2012/2013 en Las Palmas de Gran Canaria en donde los alumnos universitarios no pudieron entrar al mismo a pesar de poseer la invitación de dicho evento. Por ello decidieron formar una cadena humana con la finalidad de que nadie entrara, pero sin usar en ningún momento la violencia solo cortando el paso, aun así Paulino Rivero gracias a sus “fieles perros” consiguió acceder al recinto. Minutos más tarde la policía llega preparada a cargar y efectivamente esto hace, a pesar de no haber empleado la violencia o como algunos dicen de obstaculizar el tráfico, cuando más de una hora diversos vehículos pudieron transitar con tranquilidad. Después de largos minutos de forcejeo y probablemente demasiada represión, pueden contarse el gran número de estudiantes que portan heridas siendo incluso algunos trasladados a urgencias a pesar de esa la policía niega haber usado la violencia y los responsables de la universidad en su mayoría ven con mala cara lo sucedido.

Primero que nada ¿cómo pude negar la policía haber utilizado la violencia cuando hay tanto fotografías, como videos, testigos y partes médicos?; bueno es entendible, que no justificable, esta actitud ya que estos “agentes de la ley” a pesar de ser obreros creen estar por encima del resto de obreros, simplemente por el hecho de tener uniforme, cierto algunos cumplirán ordenes aunque no quieran hacerlo, pero ¿ de verdad creen que ayudan al pueblo así , o al poderoso, al burgués?¿ creen que personas como Paulino que permiten que apaleen a estudiantes le importara que un policía resultara herido, por ejemplo? Bueno quizás si porque tendría un poco menos de seguridad que le respalde sin siquiera dudarlo. Por otro lado el resto de personas que acuden al acto cómo no pueden ser capaces de ponerse del lado de los estudiantes, y es de destacar que una parte si lo hizo y no puede negarse que es ahí donde puede verse que a pesar retroceder en derechos, libertades, etcétera la clase obrera despierta y es más que tangible a lo largo de todo el estado y de diversos países; la lucha avanza pero también la represión véase el caso de ésta el día 8 a unos estudiantes de Navarra.

¿Qué teme el poder? Pues que ésta coyuntura hace que los pilares de este sistema que llega a su fin se tambalea con más fuerza, por ello es normal que reduzcan en educación, es normal que enfoquen la atención en cosas como la prensa rosa, el futbol, lo “malos” que son Gadafi o Fidel, y es que el mundo está lleno de villanos ¿es qué no los ven? Claro que no, ven a los equivocados el enemigo no está un isla del Caribe, el enemigo se esconde en Washington, en banqueros, dueños de multinacionales, el enemigo es el Capitalismo voraz que nunca sacia su apetito. Atreveos a pensar, a leer y corroborar. ¡CAMARADAS! SAPERE AUDE.

13/9/12

VÍDEO RELACIONADO:http://www.youtube.com/watch?v=IoJDrN5Uspw&feature=plcp

En aquella pequeña fabrica

I

     Theon se levanto  antes del amanecer como cada día, mientras bostezaba y se calzaba sus botas, escucho a su madre hablando con su padre. Al llegar a la cocina allí les oyó  hablando y desayunando a la luz de un farol, que desprendía un poco de claridad a la oscura habitación, otorgándole un aire lúgubre  y triste en cierta medida.

-Theon ¿ya te has levantado?

-Bue…nos días – dijo el muchacho a la vez que soltaba un largo bostezo.

– Muchacho come de una vez que ya es tarde- con voz ronca hablo el padre.

-Voy, voy- el chico se sentó rápidamente a comer un poco de pan y leche ya algo agria.

-¿Crees que pronto nos alcanzaran los ataques del enemigo?- pregunto la madre mientras limpiaba la mesa con un trozo de trapo ya desteñido.

-Tranquila mujer, aunque hay rumores de que se acercan, estamos a meses de que nos alcance la batalla.

 -Pero podrían llegar antes…-dijo con voz quebrada.

– No llegaran, además si vienen estaremos preparados- Declaro orgulloso el padre- de momento hemos de centrarnos en nuestro trabajo.

-¡He terminado!-Exclamo Theon mientras se levantaba de la mesa.

 -Vamos pues-dijo el padre.

II

Padre e hijo salieron de la pequeña casa, la cual mostraba en cada recoveco manchas de hollín o simple polvo.  La vivienda se hallaba en el extrarradio, junto a muchas otras viviendas de otros trabajadores  que día a día se acercaban a la zona industrial para ejercer su trabajo.

A un grupo de estos trabajadores se unieron Theon y su padre. Mientras estos hablaban de diversos temas de política, el pequeño  observaba su entorno; no hacía mucho que había empezado a trabajar en la fábrica y la verdad no entendía muy bien la situación y el mundo en el que vivía. Cada mañana veía a grandes filas de obreros marchar a las fábricas de armamento, uniformes  o cualquier otra forma de producción bélica, ya que en los últimos años se había dirigido la producción a este terreno.  Muchos andaban incluso tres o cinco kilometro hasta llegar al centro donde se hallaban las fabricas, ya que las viviendas habían sido construidas alrededor de estas a medida de que iban siendo necesarias.

En realidad este pueblo se hallaba en guerra con la nación vecina, las causas no estaban muy claras, pero ellos seguían luchando con este enemigo “invisible”. La vida era costosa y había que apañarse con lo que se pudiera, así día a día la rutina se repetía para estas personas, que no eran más que peones en la lucha de poder de las oligarquías.

III

Tras una larga caminata, Theon y su padre llegaron a la fábrica.  Su padre trabajaba en la sección de armamento pesado, él se dedicaba, debido a su edad, a coser los botones de los uniformes. Su jornada laboral era de casi 14 horas, el padre solía aguantarlas sin demasiadas quejas, pero a Theon se le hacía cada día más pesado.  La temperatura rozaba además los 35 grados y poseían unas instalaciones con muy malas condiciones, por ejemplo en la ventilación.  Eso, sumado a la mala comida ingerida,  hacía que Theon se encontrara  casi a diario sin fuerzas.

Así el muchacho pasaba largas jornadas haciendo su trabajo cada vez de una forma más autómata. El trabajo aumentaba día tras día, por lo que Theon debía trabajar cada vez más y más. Pero este no se quejaba, al fin y al cabo esta era la única realidad que conocía y así pasaban las horas, los días y los meses; siguiendo esta vida de un obrero que no ve más allá de la tarea que ejerce a través de fuerza de trabajo y en donde el patrón la intercambia por una pequeña remuneración que cada día es menor y que le permite apenas subsistir para poder seguir perpetuando un sistema que solo favorece a unos pocos.

IV

Cierto día Theon llevaba una hora trabajando  cuando escucho un fuerte sonido en seco; fue tan alto que por unos segundos todo pareció detenerse y quedarse completamente en silencio. Acto seguido todo pasó a ser un caos, los obreros corrían, otros gritaban; Theon fue arroyado por una multitud y paso unos cuantos minutos en el suelo, sin saber muy bien donde  se encontraba o que pasaba. Cuando consiguió levantarse recorrió los largos pasillos de la fábrica, que ahora se encontraban totalmente vacios, aunque de vez en cuando algún rezagado pasaba a su lado corriendo, así siguió andando de pasillo en pasillo hasta que consiguió salir.

El pequeño se encontró a  todo el mundo corriendo por las calles, los edificios  se encontraban medio derruidos  y otros ardiendo. El humo apenas dejaba deslumbrar el cielo teñido del  tono amarrillo y rojizo del  amanecer. Tras dar unos pasos, llego al borde de una calle que bajaba, y desde allí pudo vislumbrar toda la zona y como edificios enteros se hacían añicos, por todos lados habían explosiones. Miro a su lado y vio a otro niño tendido en el suelo con la mirada perdida en el cielo, su cuerpo se hallaba desgarrado   probablemente por alguna explosión; Theon se acerco y tras ver que estaba muerto, levanto  la vista, ahora lo comprendía  esa guerra que supuestamente tardaría en afectarles o que quizás nunca lo haría, les había alcanzado.

 Okami

 PD: adelanto de una historia mucho mayor . 

 

III

» Y subió hasta la más alta montaña, ahí lloro amargamente por ella, por ese niño que no encontraba que comer, por el dolor, por lo perdido , por la vida. Pero con el primer rayo de luz seco sus mejillas, levanto su cabeza y marcha montaña abajo; la lucha continuaba y él era el protagonista»

OKAMI

«Un pueblo ignorante es un instrumento ciego de su propia destrucción» 

Simón  Bolívar

Utopía

El rayo surca, sangriento, 
El lóbrego nubarrón: 
Echa el barco, ciento a ciento, 
Los negros por el portón. 

El viento, fiero, quebraba 
Los almácigos copudos; 
Andaba la hilera, andaba, 
De los esclavos desnudos. 

El temporal sacudía 
Los barracones henchidos: 
Una madre con su cría 
Pasaba, dando alaridos. 

Rojo, como en el desierto, 
Salió el sol al horizonte: 
Y alumbró a un esclavo muerto, 
Colgado a un seibo del monte. 

Un niño lo vio: tembló 
De pasión por los que gimen: 
¡Y, al pie del muerto, juró 
lavar con su vida el crimen!

José Martí 

II

 

«Sueño y canto, melodía del día a día. Ocaso que entristece, pero estremece… paso a paso hasta ese ocaso, triste desilusión que no podrá narrar ni la más bella canción»

Okami